Nuestras protagonistas de hoy son unas palmeras cuya popularidad está aumentando muy rápido en los últimos tiempos. Cada vez son más los que, buscando una planta exótica capaz de soportar las inclemencias del tiempo, optan por plantar en su jardín un ejemplar de esta extraordinaria y bella planta.
Si tú también buscas algo especial, pon una Parajubaea. Verás como no te arrepientes.
El género de las Parajubaea comprende sólo tres especies: la P. cocoides, la P. sunkha y la P. torallyi. Son originarias de la Cordillera de los Andes, donde están amenazadas por pérdida de hábitat. Pese a ello, en jardines es cada vez más sencillo encontrarlas, ya que soportan heladas de hasta los 5 grados Celsius bajo cero. Alcanzan una altura aproximada de 10m, con un grosor de tronco de 40 a 50cm según variedad. Poseen hojas pinnadas, con una longitud de 1m cada una, de color verde oscuro. Así, te darán una agradable sombra en los meses más calurosos.
Si bien las raíces de las palmeras, al ser superficiales, no suelen dañar las tuberías del hogar ni levantar suelos, sí que se recomienda dejarle espacio para que pueda desarrollarse correctamente. Lo ideal es plantarla a una distancia de, mínimo, 3m de la pared y a 1m del suelo de hormigón. De esta manera, la palmera podrá crecer más o menos recta, sin que su tronco tenga que crecer por encima del suelo.
La Parajubaea no es una palmera exigente. Tanto es así que si en tu jardín dispones de un terreno arcilloso, o por el contrario arenoso, podrás tenerla sin problemas. Lo único que necesita es recibir el sol directamente, y riegos ocasionales (unas 2 veces por semana en verano, y 1-2 cada siete días el resto del año). Abónala con un abono específico para palmeras durante toda la temporada de crecimiento -desde primavera hasta otoño- para conseguir que saque un mayor número de hojas.
Ahora que sabemos más sobre esta asombrosa palmera, ¿te animas a tener una en tu jardín?
El artículo Dale un toque exótico a tu jardín con una Parajubaea ha sido originalmente publicado en Jardineria On.